Exposición 'Palestina 1948': fin de la polémica

Abir Sarras-Traducción: Ingrid de Vries

Un juzgado en Ámsterdam dictaminó que la exposición "Palestina 1948, memorias de una patria perdida", no es ofensiva ni induce a ninguna forma de discriminación o antisemitismo. Un visitante había presentado una denuncia contra el Tropenmuseum (Museo de los Trópicos), donde se exhibe la muestra, por incitar al odio y a la discriminación de los judíos. Con la exposición se conmemora la catástrofe de Al Nakba, cuando la creación del Estado de Israel condujo al exilio a 750.000 palestinos.

Quejas
Michael Jacobs, un judío holandés, se sintió ofendido al visitar la exhibición en Ámsterdam, por lo que presentó quejas al museo, e inició una discusión pública en el diario holandés ‘Het Parool'. Según Jacobs, la imagen unilateral palestina que se da en la exposición de la historia cuestiona la legitimidad de la creación del Estado de Israel en 1948. Este hecho desembocó en el exilio de 750.000 palestinos que buscaron refugio en países árabes vecinos como Líbano, Jordania y Siria.

Jacobs se sentía personalmente amenazado por el contenido de la muestra porque, según él, incita al odio contra los judíos. Abogó ante la Corte por ampliar la exposición con un documento de 12 aspectos, señalando los hechos históricos de 1948 desde el punto de vista judío, incluyendo el exilio de cientos de miles de judíos de países árabes y la anulación del derecho al retorno.

Sin embargo, el juez decidió que no había nada insultante en la exposición, y que no se induce al odio ni a la discriminación de los judíos. "Nada en el texto o material de video de la exposición incita al odio o a la violencia" dijo el juez, alegando que el tono de la muestra no ataca al pueblo judío como raza ni a ninguna de sus creencias.

Visión parcial
Jacobs protestó contra los hechos históricos que acompañaban los testimonios en la exhibición. Según Jacobs, los hechos presentados no son exactos y deberían ser modificados. El director del Tropenmuseum, Lejo Schenk, admite que en la exposición se muestra una parte del conflicto, pero se ha hecho a propósito. Según Schenk, el público holandés conoce muy bien la historia de la creación del Estado judío. Él considera que la tarea de su centro, como museo de las culturas del mundo entero, es centrar la atención en las historias menos conocidas como la de los refugiados palestinos.

Sin embargo, Tuvit Shlomi, del Centro para Información y Documentación de Israel, CIDI, de la Haya, opina que es una "interpretación muy parcial de la historia". "De un museo conocido uno esperaría que no se hagan compromisos sobre hechos históricos y que se reflejen ambas partes de la historia. Solo así, el visitante puede entender los testimonios", según Shlomi.

Testimonios
El Tropenmuseum no quería que la exposición que fuera una reconstrucción cronológica de los sucesos de 1948, porque ambas partes en el conflicto ven lo sucedido desde perspectivas diferentes. El museo optó por representar los hechos desde el punto de vista de testimonios personales. En la exposición se muestran entrevistas con refugiados palestinos de la primera generación que recuerdan las circunstancias por las que se refugiaron en Líbano. Las entrevistas son presentadas como parte del archivo de Al Nakba _catástrofe en árabe_, que contienen los testimonios personales de 500 refugiados palestinos sobre este acontecimiento.

En la exposición hay también doce retratos del fotógrafo norteamericano Alan Gignoux. Éstos son expuestos junto a una fotografía del lugar donde estaba la casa del refugiado en Palestina, que en la mayoría de los casos ya no existe o está destruida.

Schenk se muestra positivo sobre el veredicto del tribunal. Una orden de cambiar el contenido de la exposición era improbable, ya que se trata de un claro caso de libertad de expresión, según el director del Tropenmuseum.

Fuente: Radio Netherland