La fotografía, por la lente de sus creadores

Juan Rodrigo Llaguno Especializado en el retrato, pero sin duda polifacético, ha sabido entender el sentido que puede tener la imagen y transmitirlo. Mexico.- Aunque nació en Francia, la mayor parte de su trabajo ha sido desarrollado desde Monterrey logrando diversas distinciones. ¿Cómo se valora artísticamente a la fotografía en estos momentos dentro del ámbito nacional? En los últimos 15 años ha habido una revaloracion de la historia de la fotografia mexicana así como de sus creadores contemporáneos; pero en cuanto a la publicacion de libros fotográficos y coleccionismo de la fotografía falta mucho por hacer. ¿Ha madurado el consumidor fotográfico, contamos ya en México con coleccionistas interesados en la fotografía? El colecionismo fotográfico en México es mínimo, contrario a las tendencias americanas y europeas donde la fotografía es parte de las colecciones de arte conteporáneas más importantes. ¿Existe una valoración museística de la fotografía en México? En los últimos 20 años se ha incrementado el interés de ciertos museos en México hacia la fotografía, pero falta que estos museos promuevan más el estudio del lenguaje fotográfico. ¿Los museos y galerías de Monterrey tienen puertas abiertas para la foto? Siento que si el trabajo fotográfico de los artistas locales tiene el nivel y la exigencia de los parámetros del arte fotográfico a nivel mundial, no tendría problema para encontrar espacio de calidad en la ciudad. Pedro Valtierra A través de rostros, paisajes y personalidades, el director de la revista Cuartoscuro ha promovido el arte de la lente y destacado en la disciplina en el ámbito internacional. A él lo distingue su labor de campo y preocupación por la difusión de esta disciplina. Aquí comparte sus puntos de vista sobre la foto actual. ¿Cómo se valora artísticamente a la fotografía en estos momentos dentro del ámbito nacional? Aún no tiene el reconocimiento que merece. La hay para un grupo de fotógrafos nada más. Creo que debemos seguir trabajando para que la foto tenga un mayor reconocimiento; exponer en todos los espacios que nos inviten. Dar precios de acuerdo al mercado. Somos un país productor de buenas imágenes desde siempre. Sin embargo, nosotros mismos, los fotógrafos, tenemos que generar los espacios y no quedarnos sentados a que el gobierno nos beque o nos invite a exponer. ¿Los museos y galerías de Monterrey tienen puertas abiertas para la foto? Los museos no tanto. Existen galerías interesadas, lamentablemente se fijan más en los extranjeros que en los mismos regiomontanos, y esto de buscar en el extranjero es algo incomprensible; creo que los galeristas deben también hacer el esfuerzo por crear y estimular un mercado de fotografía abriendo sus puertas a los fotógrafos. Y también los fotógrafos de pronto nos quedamos parados sin proponer nada a los galeristas. Pienso que se debe trabajar más sobre todo con los jóvenes. ¿Cómo se podría describir al mercado de la foto artística en México y específicamente en Monterrey? ¿Es un mercado en desarrollo, está estancado, qué expectativas despierta? En nuestro país no hay un mercado amplio, son pocos los que compran foto y los hay en todo el país. Yo he tenido oportunidad de vender fotos en casi toda la República. Y en Monterrey, como dije, hace falta que la foto se muestre más. Hay una corriente de foto moderna conceptual que aleja al gran público de las salas de exposiciones. Lo mejor es que se muestre todo lo que hay de foto: desde lo clásico hasta lo que se produce con cámaras antiguas, lo digital que no todo es bueno, color, etc. ¿Cómo se podría describir al mercado de la foto artística en México y específicamente en Monterrey? ¿Es un mercado en desarrollo, está estancado, qué expectativas despierta? El mercado de la fotografía en Monterrey es un mercado que apenas está comenzando; ha estado estancado por muchos años, lo que faltaría hacer sería difundir más el valor artístico, académico e intelectual de la fotogtafía para así abrir el interés hacia el colecionismo de esta expresion artística. Monterrey/ Gabriel Contreras Fuente: Milenio