"El vasto llano sólo puede llenarse con metáforas"
El fotógrafo valora el trabajo documental, pues en el futuro será lo único que muestre cómo era el mundo(Oswer Díaz)
Rodrigo Benavides inaugura el domingo una muestra con 151 fotografías del llano
MARÍA GABRIELA MÉNDEZ
EL UNIVERSAL
El resultado dejó su impronta en las 151 imágenes que desde el domingo 12 se abren paso en las salas del Museo de Arte Contemporáneo bajo el título Rodrigo Benavides. La llanura improsulta.
Luego de recorrer exhaustivamente Apure, Barinas, Guárico, Portuguesa y Cojedes, el fotógrafo sabe que los músicos y los poetas que han encontrado inspiración en esa llanura sólo pueden recurrir a la poesía: "En un espacio tan grande físicamente sólo caben las metáforas, las palabras normales no alcanzan para describir tanta maravilla. He tratado de hacer eso con el trabajo fotográfico".
Pero ese deslumbramiento no ha llegado por casualidad, ni tampoco se ha quedado en el impacto. Benavides ha documentado muy bien su trabajo, lo que le ha permitido irse metiendo poco a poco, propiciando esas escenas que busca. "Haber leído muchos libros valiosos me permite estar atento a situaciones que de otra manera pasarían desapercibidos". Pero también se ha nutrido de la música y la literatura: "Me ha ayudado porque se refieren a imágenes".
Benavides está convencido de que el llano es un territorio muy rico culturalmente y que, sin embargo, no se le ha dado el suficiente valor. "No se ha valorado lo suficiente la calidad literaria y musical que se hace en el llano, que es de un elevadísimo nivel. La gente lo ve como uno, es como una historia pasada y tengo la percepción de que a las generaciones más jóvenes, están alerta a otras cosas antes que a estas maravillas, hay mucho que valorar".
Para él, el mayor descubrimiento de este proyecto -que es mucho más extenso que la propia fotografía- es la luz: "Aunque parezca una evidencia, lo más importante es cómo la luz trabaja en esa zona. La forma cómo la luz ejerce un impacto que es prácticamente metafísico. En primer lugar a través de la vista, nos invita a ser más conscientes de lo que tenemos frente a la vista, sólo hay que sentarse a observar".
La entrada al llano -ese paisaje que no es monótono- se hace a través del paisaje, cuenta. Pero después del paisaje, el fotógrafo encontró algo maravilloso: la gente, con ese sentimiento de apego a su tierra y sus raíces, algo que los ciudadanos han perdido.
Este fotógrafo sólo trabaja con película. Y asume la fotografía documental en el estricto sentido: nada de intervención de él, más que para determinar dónde terminará la imagen. "El documentalismo es una bendición para nuestro nietos. Si no fuera así verían un mundo que no existió. Hay que asignarle el valor que tiene. Se está abusando de la transformación de las imágenes y hay cosas que vale la pena conservar como son".
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