Sergio Villalba : El fotógrafo de las olas
Sergio Gilarana
Descripción Reportero Gráfico
Nombre: Sergio Villalba
Cámara preferida: Pentax 6x7
A quién admira:
A la persona más luchadora que haya conocido, mi abuela, y a la descendencia de ella, mi madre. La tenacidad que he mamado de ellas está siendo clave para seguir adelante en una profesión tan complicada como la fotografía unida a la insularidad
Su foto preferida (propia) :
No creo que tenga solo una. Tengo varias fotos que me hacen realmente feliz cuando las miro en cada uno de los campos que abarco.
Si no fuera fotógrafo le hubiera gustado ser:
Salí del nido bastante pronto. A los 18 años me fui a vivir a Barcelona a trabajar. Siempre tuve claro que quería evolucionar y no conformarme con trabajos que podría hacer aquí. Allí trabajé en multimedia, llegué a tener mi propio estudio, fui profesor de una universidad privada de diseño gráfico y trabajé en una fotomecánica importante retocando las fotos del Playboy o el National Geographic. Nada de eso me llenó al 100%. Mientras tanto trabajaba de fotógrafo para el Jamboree y el Jazzroom, las mayores salas de jazz de Barcelona, y me fui impregnando del placer de fotografíar.
¿Qué haría si no fuera fotógrafo? Sinceramente no lo sé. Un poco más infeliz que ahora con toda seguridad.
Sergio Villalba ha hecho un parón en las islas después de regresar de Perú donde ha estado haciendo un photoshooting para una marca comercial. Pero...¿quién es Sergio Villalba?. El sueño de muchos aficionados a la fotografía bien podría ser viajar por todo el mundo y que le paguen por hacer fotos...¿Cómo lo has conseguido?
Como comentaba anteriormente, mi fórmula es la tenacidad y la lucha. No es fácil vivir de la fotografía hoy en día con tanta competencia “desleal” (la fotografía digital ha hecho mucho daño al mercado). Si a eso le sumamos la insularidad y lo lejos que estamos de las “grandes oportunidades”, el reto se vuelve sumamente complicado. Me considero fanático de Internet, la necesito como el agua, y la uso para mantener el contacto con el exterior. A todo esto se le suman toda las buenas personas que me he tropezado en el camino y que me han ayudado en todo momento a despegar, que me han puesto en contacto con gente importante del sector y que han depositado toda su confianza en mi cuando todavía no había podido demostrar casi nada. Ahora trabajo de cerca con las revistas que siempre compré. Vivo un sueño que jamás pensé que fuera alcanzable. Los viajes salen de un día para otro, y tengo las islas como la base perfecta donde volver y encontrar toda la tranquilidad que necesito. No todo es siempre tan bonito como parece. Esta clase de vida es inestable, cansada y peligrosa e incómoda por la cantidad de material que llevo encima en mis viajes. Pero hoy por hoy esto es justo lo que necesito.
La fotografía deportiva es una disciplina que mayor inversión requiere. ¿Cuáles han sido tus dificultades en este sentido? ¿Con qué equipo cuentas actualmente?
La mayor dificultad que he tenido fue hace casi 3 años en Costa Rica. Me robaron 6 mil euros en equipo y me vine a casa sin nada. Tuve que trabajar de nuevo para volver a empezar desde cero. Eso fue un palo muy duro, pero quedarte en un país centroamericano sin un duro y sin billete de avión también supone un aprendizaje importante que me ha servido de mucho. Ciertamente, la fotografía deportiva es muy cara. Hace unas semanas estuve en Perú y en aduanas me hicieron declarar el equipo que llevaba. La lista fueron 30 mil dólares, tirando por lo bajo. Me hicieron dejarles una fianza de casi 4 mil. ¡No es cómodo viajar a según que sitios con tanto equipo! Trabajo con Canon, tanto digital como analógico. Tengo dos cuerpos de cada. En un viaje puede suponer un desastre que te falle una de las cámaras y no tener otra de recambio. Mis ópticas van desde el fisheye 15mm., hasta un 300-800. Además de eso, una carcasa acuática para la 1v y la MarkII, flashes, infrarrojos, reflectores, difusores, discos duros, … Y como último, la joya de la corona, mi antigua Pentax 6x7. Los colores y la calidad que obtengo con esa cámara no la tendré nunca con el digital. ¡Larga vida a la película!
¿Cuál es el mejor sitio para conseguir la mejor foto? La orilla con un buen teleobjetivo o en el agua, en el rompiente de la ola?
Depende sobre todo del tipo de ola. Desde el agua trabajas con un ojo de pez, lo que te obliga a estar a escasos centímetros del surfista. Todo lo que pasé más lejos de medio o un metro está demasiado lejos para ti, por lo que pierdes mucha acción. Si la ola es muy larga es una tontería disparar desde el agua (a no ser que te coloques en el canal y dispares con el 70-200). La fotografía acuática es para olas cortas y potentes. Desde el agua se puede ser muy creativo, y jugar con la luz mucho más que desde fuera. Pero desde fuera puedes mostrar parte del paisaje y hasta la idiosincrasia del lugar. Puedes poner elementos en primer plano y en el fondo. Puedes obtener casi el 100% de la acción. Puedes jugar con los contraluces, con las siluetas que te dan las luces del atardecer o el detalle y la luz cálida del amanecer. Hoy en día se está llevando incluso la fotografía de estudio con iluminación artificial al agua. Ciertamente no hay límites.
Por cierto, ya que hablamos de las fotos realizadas desde el agua, ¿cómo consigue uno no jugarse la vida en la toma de esas fotos?
Uf! Uno tiene que tener siempre MUY claro donde están sus limites. La fotografía acuática requiere no solo conocer muy bien el mar y las rompientes, sino también una buena preparación física. Estás donde rompen las olas justo donde un surfista pasa a toda velocidad por ti a escasos centímetros. En momentos te juegas la vida. Yo aprecio demasiado la mía y no me apetece terminarla de esta manera.
El equipo fotográfico de un surfero está expuesto a enemigos terribles como son la salitre y la arena. ¿Cuál es la vida útil de un equipo sometido a esas condiciones? Soy bastante meticuloso con la limpieza del equipo. De momento no me ha fallado ninguna de las cámaras. Recientemente, en un trip que hice a fuerteventura con chicas se me estropeó mi pentax 6x7 y un 50mm. 1.4 por el polvo. Aún teniendo todos los cuidados, el polvo y la sal es suficientemente escurridizo para darte un buen susto!
¿Qué valoras más al decidirte por una lente, la velocidad de enfoque o la luminosidad?
Sobre esas dos cosas valoro la calidad de la imagen. A veces puedes comprar opticas de marcas alternativas muy luminosas y con una velocidad de enfoque aceptable pero que dan un nivel de detalle y unas aberraciones terribles. Si es para fotografía de acción, la velocidad de enfoque es muy importante.
Aparte de dedicarte a fotografiar surf, has trabajado como reportero gráfico de diarios locales. ¿Qué opinión tienes de la prensa canaria, a nivel de imagen?
A nivel de prensa hay gente que destaca muchísimo. He visto fotos impresionantes del año pasado en el periodo de llegada masiva de pateras. Pero, sinceramente, estamos a años luz de lo que se hace fuera. Ya no solo en fotografía, en Canarias todavía vivimos con el sentimiento de estar colonizados y pensamos que lo de fuera siempre es lo mejor. Los de aquí apenas recibimos apoyos institucionales ni formativos. Tenemos una bienal como fotonoviembre que no “protege” ni incentiva a los fotógrafos locales, unos dirigentes que se consideran nacionalistas y no motivan y prioriza lo que nace y crece en la tierra como se hace en Catalunya o el País Vasco. He recibido siempre más apoyo, oportunidades y reconocimiento de fuera que de las islas, y eso es algo que puedo decir más alto, pero no más claro. Por este abandono cultural puedo asegurar que el concepto de estética en Canarias más que muerto todavía no ha nacido, y eso se nota en el diseño, la publicidad, y como no, en la fotografía. Pondría la mano en el fuego porque la gente que destaca en las islas (¡que no es poca!) ha mamado mucho de otros lugares. Espero que los que nos gobiernan se den cuenta algún día de que la cultura es tan importante como las infraestructuras. Aunque pensándolo bien, nunca ha interesado un pueblo bien educado y culturizado. Puede resultarles contraproducente a los señores de la corbata.
¿Cuáles son tus próximos proyectos?
Ahora estoy trabajando en las fotos que me traje de Perú para mandarlas a O’neill Europa, y en unos días tengo que ir a Barcelona a hacer unos encargos. En julio voy a hacer un roadtrip en furgoneta con varios surfistas desde Cádiz a Francia por todo Portugal, persiguiendo playas, olas, amaneceres y atardeceres. En setiembre toca explorar una tierra fría como Islandia, también para hacer un reportaje de surf, y en diciembre o enero un viaje en barco por la costa de un país africano, posiblemente para una
Fuente: Foto Canarias Digital
Descripción Reportero Gráfico
Nombre: Sergio Villalba
Cámara preferida: Pentax 6x7
A quién admira:
A la persona más luchadora que haya conocido, mi abuela, y a la descendencia de ella, mi madre. La tenacidad que he mamado de ellas está siendo clave para seguir adelante en una profesión tan complicada como la fotografía unida a la insularidad
Su foto preferida (propia) :
No creo que tenga solo una. Tengo varias fotos que me hacen realmente feliz cuando las miro en cada uno de los campos que abarco.
Si no fuera fotógrafo le hubiera gustado ser:
Salí del nido bastante pronto. A los 18 años me fui a vivir a Barcelona a trabajar. Siempre tuve claro que quería evolucionar y no conformarme con trabajos que podría hacer aquí. Allí trabajé en multimedia, llegué a tener mi propio estudio, fui profesor de una universidad privada de diseño gráfico y trabajé en una fotomecánica importante retocando las fotos del Playboy o el National Geographic. Nada de eso me llenó al 100%. Mientras tanto trabajaba de fotógrafo para el Jamboree y el Jazzroom, las mayores salas de jazz de Barcelona, y me fui impregnando del placer de fotografíar.
¿Qué haría si no fuera fotógrafo? Sinceramente no lo sé. Un poco más infeliz que ahora con toda seguridad.
Sergio Villalba ha hecho un parón en las islas después de regresar de Perú donde ha estado haciendo un photoshooting para una marca comercial. Pero...¿quién es Sergio Villalba?. El sueño de muchos aficionados a la fotografía bien podría ser viajar por todo el mundo y que le paguen por hacer fotos...¿Cómo lo has conseguido?
Como comentaba anteriormente, mi fórmula es la tenacidad y la lucha. No es fácil vivir de la fotografía hoy en día con tanta competencia “desleal” (la fotografía digital ha hecho mucho daño al mercado). Si a eso le sumamos la insularidad y lo lejos que estamos de las “grandes oportunidades”, el reto se vuelve sumamente complicado. Me considero fanático de Internet, la necesito como el agua, y la uso para mantener el contacto con el exterior. A todo esto se le suman toda las buenas personas que me he tropezado en el camino y que me han ayudado en todo momento a despegar, que me han puesto en contacto con gente importante del sector y que han depositado toda su confianza en mi cuando todavía no había podido demostrar casi nada. Ahora trabajo de cerca con las revistas que siempre compré. Vivo un sueño que jamás pensé que fuera alcanzable. Los viajes salen de un día para otro, y tengo las islas como la base perfecta donde volver y encontrar toda la tranquilidad que necesito. No todo es siempre tan bonito como parece. Esta clase de vida es inestable, cansada y peligrosa e incómoda por la cantidad de material que llevo encima en mis viajes. Pero hoy por hoy esto es justo lo que necesito.
La fotografía deportiva es una disciplina que mayor inversión requiere. ¿Cuáles han sido tus dificultades en este sentido? ¿Con qué equipo cuentas actualmente?
La mayor dificultad que he tenido fue hace casi 3 años en Costa Rica. Me robaron 6 mil euros en equipo y me vine a casa sin nada. Tuve que trabajar de nuevo para volver a empezar desde cero. Eso fue un palo muy duro, pero quedarte en un país centroamericano sin un duro y sin billete de avión también supone un aprendizaje importante que me ha servido de mucho. Ciertamente, la fotografía deportiva es muy cara. Hace unas semanas estuve en Perú y en aduanas me hicieron declarar el equipo que llevaba. La lista fueron 30 mil dólares, tirando por lo bajo. Me hicieron dejarles una fianza de casi 4 mil. ¡No es cómodo viajar a según que sitios con tanto equipo! Trabajo con Canon, tanto digital como analógico. Tengo dos cuerpos de cada. En un viaje puede suponer un desastre que te falle una de las cámaras y no tener otra de recambio. Mis ópticas van desde el fisheye 15mm., hasta un 300-800. Además de eso, una carcasa acuática para la 1v y la MarkII, flashes, infrarrojos, reflectores, difusores, discos duros, … Y como último, la joya de la corona, mi antigua Pentax 6x7. Los colores y la calidad que obtengo con esa cámara no la tendré nunca con el digital. ¡Larga vida a la película!
¿Cuál es el mejor sitio para conseguir la mejor foto? La orilla con un buen teleobjetivo o en el agua, en el rompiente de la ola?
Depende sobre todo del tipo de ola. Desde el agua trabajas con un ojo de pez, lo que te obliga a estar a escasos centímetros del surfista. Todo lo que pasé más lejos de medio o un metro está demasiado lejos para ti, por lo que pierdes mucha acción. Si la ola es muy larga es una tontería disparar desde el agua (a no ser que te coloques en el canal y dispares con el 70-200). La fotografía acuática es para olas cortas y potentes. Desde el agua se puede ser muy creativo, y jugar con la luz mucho más que desde fuera. Pero desde fuera puedes mostrar parte del paisaje y hasta la idiosincrasia del lugar. Puedes poner elementos en primer plano y en el fondo. Puedes obtener casi el 100% de la acción. Puedes jugar con los contraluces, con las siluetas que te dan las luces del atardecer o el detalle y la luz cálida del amanecer. Hoy en día se está llevando incluso la fotografía de estudio con iluminación artificial al agua. Ciertamente no hay límites.
Por cierto, ya que hablamos de las fotos realizadas desde el agua, ¿cómo consigue uno no jugarse la vida en la toma de esas fotos?
Uf! Uno tiene que tener siempre MUY claro donde están sus limites. La fotografía acuática requiere no solo conocer muy bien el mar y las rompientes, sino también una buena preparación física. Estás donde rompen las olas justo donde un surfista pasa a toda velocidad por ti a escasos centímetros. En momentos te juegas la vida. Yo aprecio demasiado la mía y no me apetece terminarla de esta manera.
El equipo fotográfico de un surfero está expuesto a enemigos terribles como son la salitre y la arena. ¿Cuál es la vida útil de un equipo sometido a esas condiciones? Soy bastante meticuloso con la limpieza del equipo. De momento no me ha fallado ninguna de las cámaras. Recientemente, en un trip que hice a fuerteventura con chicas se me estropeó mi pentax 6x7 y un 50mm. 1.4 por el polvo. Aún teniendo todos los cuidados, el polvo y la sal es suficientemente escurridizo para darte un buen susto!
¿Qué valoras más al decidirte por una lente, la velocidad de enfoque o la luminosidad?
Sobre esas dos cosas valoro la calidad de la imagen. A veces puedes comprar opticas de marcas alternativas muy luminosas y con una velocidad de enfoque aceptable pero que dan un nivel de detalle y unas aberraciones terribles. Si es para fotografía de acción, la velocidad de enfoque es muy importante.
Aparte de dedicarte a fotografiar surf, has trabajado como reportero gráfico de diarios locales. ¿Qué opinión tienes de la prensa canaria, a nivel de imagen?
A nivel de prensa hay gente que destaca muchísimo. He visto fotos impresionantes del año pasado en el periodo de llegada masiva de pateras. Pero, sinceramente, estamos a años luz de lo que se hace fuera. Ya no solo en fotografía, en Canarias todavía vivimos con el sentimiento de estar colonizados y pensamos que lo de fuera siempre es lo mejor. Los de aquí apenas recibimos apoyos institucionales ni formativos. Tenemos una bienal como fotonoviembre que no “protege” ni incentiva a los fotógrafos locales, unos dirigentes que se consideran nacionalistas y no motivan y prioriza lo que nace y crece en la tierra como se hace en Catalunya o el País Vasco. He recibido siempre más apoyo, oportunidades y reconocimiento de fuera que de las islas, y eso es algo que puedo decir más alto, pero no más claro. Por este abandono cultural puedo asegurar que el concepto de estética en Canarias más que muerto todavía no ha nacido, y eso se nota en el diseño, la publicidad, y como no, en la fotografía. Pondría la mano en el fuego porque la gente que destaca en las islas (¡que no es poca!) ha mamado mucho de otros lugares. Espero que los que nos gobiernan se den cuenta algún día de que la cultura es tan importante como las infraestructuras. Aunque pensándolo bien, nunca ha interesado un pueblo bien educado y culturizado. Puede resultarles contraproducente a los señores de la corbata.
¿Cuáles son tus próximos proyectos?
Ahora estoy trabajando en las fotos que me traje de Perú para mandarlas a O’neill Europa, y en unos días tengo que ir a Barcelona a hacer unos encargos. En julio voy a hacer un roadtrip en furgoneta con varios surfistas desde Cádiz a Francia por todo Portugal, persiguiendo playas, olas, amaneceres y atardeceres. En setiembre toca explorar una tierra fría como Islandia, también para hacer un reportaje de surf, y en diciembre o enero un viaje en barco por la costa de un país africano, posiblemente para una
Fuente: Foto Canarias Digital
0 comentarios:
Publicar un comentario